miércoles, 24 de agosto de 2011

Harto

de comprar paraguas y seguir mojándose
de calmar al mar y naufragar
de regalar el alma y sentirse estafado
de respirar y asfixiarse

sábado, 13 de agosto de 2011

Ardor

Sólo queda respirar. A veces meter la cabeza bajo el agua puede ser más relajante que respirar la miasma que las situaciones nos arrojan. Y una vez más, el castillo se incendia. No importa qué tanto se ornamente, no importa qué tanto quede limpio. Basta una ligera chispa, mínima, ínfima como la décima parte de una gota de lluvia, sólo hace falta eso para que el fuego brote. Y el ardor. No el de Ada, ni el de alguien; el ardor de un alma que a veces quiere descansar de las bombardas, pero no puede. Ni podrá.

martes, 9 de agosto de 2011

Voces

Cuando peleas con el aire
Cuano te enfrentas a un fantasma
Cuando lanzas puñetazos a la nada
Cuando lees y extrañas
Cuando das vueltas en la cama
Cuando cierras los ojos y ves mejor aún
Cuando te calmas con el estómago hirviente
Cuando te carcomen las historias
Cuando caes y hay vértigo
Cuando saltas al vacío y te chocas con el suelo
Cuando escupes y te manchas
Cuando maldices y te sonrojas
Cuando sudas y estás seco
Cuando  sientes